Misa de Hoy - Domingo 4 de Febrero
Durante la celebración, recuerde desactivar sus ALARMAS y poner su teléfono en modo SILENCIO
Procesión de entrada: Venga tu Reino
Somos pueblo de Dios Iglesia peregrina
Como una gran familia que camina unida
Venimos a cantar en la fracción del Pan
Que nuestra fuente es el Dios de la vida.
Venga a nosotros tu reino de amor
Pon a tu pueblo de pie
Celebraremos contigo Señor
renueva nuestra esperanza
Celebraremos contigo Señor
Una fiesta de nueva alianza.
Somos cuerpo de Cristo, Iglesia que comparte
y que alimenta al mundo tan dolido de hambre
Venimos a cantar en la fracción del Pan
Que nuestra fuente es el Dios hecho carne.
Acto Penitencial
Señor, ten piedad de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, ten piedad de nosotros.
Cristo, ten piedad de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros.
Gloria
Gloria a Dios en el cielo
y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor
Por tu inmensa Gloria te alabamos te bendecimos,
te adoramos, te glorificamos, te damos gracias
Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso,
Señor hijo único Jesucristo, Señor Dios,
Cordero de Dios, Hijo del Padre.
Tú que quitas el pecado del mundo
ten piedad de nosotros
Tú que quitas el pecado del mundo
atiende nuestras súplicas
Tú que estas sentado a la derecha del Padre
ten piedad de nosotros
Porque sólo tú eres santo, sólo tu Señor,
sólo tú altísimo Jesucristo
con el Espíritu Santo,
en la Gloria de Dios Padre
Amén, Amén.
Salmo Responsorial
Alaben al Señor que sana a los afligidos
Alaben al Señor que sana a los afligidos
Aclamación del Evangelio
Aleluya, aleluya,
aleluya,
aleluya.
Aleluya, aleluya, aleluya, aleluya.
Aclamación después del Evangelio
No me eligieron ustedes,
Fui yo quien los elegí.
Ustedes son mis amigos,
serán mis testigos, vivirán en mi.
Oración de los Fieles
Que te escuchemos, Señor, Señor Jesús
Presentación de Dones: Juntos nos acercamos
Juntos nos acercamos a esta mesa para ofrecer,
todo lo que tenemos es para ti.
Es nuestra vida, nuestra esperanza, nuestro dolor y amor,
deja que nuestras manos lleguen a ti.
El pan que es tierra, fruto y trabajo, Tu cuerpo ya será,
Dánoslo y nuestra vida renacerá.
El vino convertido en tu sangre dánoslo a beber
Y se hará fecundo nuestro dolor.
Como el pan y el vino, que se transforman en este altar
Transforma nuestra vida y nuestro hogar.
Santo
Santo, santo, santo es el Señor
Dios del Universo, santo es el Señor
El cielo y la tierra
están llenos de su Gloria
Hosanna en el cielo
Bendito es el que viene en el nombre del Señor
Padre Nuestro
Padre Nuestro, tú que estás
en los que aman la verdad,
haz que el Reino que das tú, Señor,
llegue pronto a nuestro corazón,
que el amor que Tu Hijo nos dejó,
ese amor, esté ya con nosotros.
Padre Nuestro, que estás en el Cielo,
Santificado sea tu nombre,
Venga a Nosotros tu Reino,
Hágase tu voluntad aquí en la Tierra como en el Cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día,
perdona nuestras ofensas
como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden.
no nos dejes caer en la tentación.
Y líbranos del mal.
En el pan de la unidad,
Cristo danos Tú la paz,
y olvídate de nuestro mal
si olvidamos el de los demás.
No permitas que caigamos en tentación
¡Oh, Señor! Ten piedad de nosotros,
ten piedad del mundo.
Cordero de Dios
Cordero de Dios,
que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros
Cordero de Dios,
que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros
Cordero de Dios,
que quitas el pecado del mundo,
Danos la paz, danos la paz
COMUNIÓN
Sígueme
Mira Jesús yo te traigo una gran inquietud:
que debo hacer, nuestro mundo sufre esclavitud,
le falta Paz y en muchos no hay esperanza,
Dime Señor como puedo sembrar más amor.
Sígueme soy camino, única ruta a seguir,
sígueme soy la vida, que con amor debes compartir.
Oigo tu voz en la calma de mi oración,
oigo tu voz en el pobre que me pide pan,
desde tu cruz tú me pides mayor compromiso,
dime Señor cómo puedo sembrar más amor.
Yo como tú buscaré dar más que recibir,
no hay amor , sin sufrir, sin luchar, sin servir.
Mas sin tu amor olvidando te pierdo de vista,
grita Señor aún más fuerte que te pueda oír.
Tu modo
Jesús al contemplar en tu vida
El modo que tú tienes de tratar a los demás
Me dejo interpelar por tu ternura
Tu forma de amar nos mueve a amar
Tu trato es como el agua cristalina
Que limpia y acompaña el caminar
Jesús enséñanos tu modo
De hacer sentir al otro más humano
Que tus pasos sean nuestros pasos
nuestro modo de proceder
Jesús hazme sentir con tus sentimientos,
Mirar con tu mirada, comprometer mi acción
Donarme hasta la muerte por el Reino
Defender la vida hasta la Cruz
Amar a cada uno como amigo
Y en la oscuridad llevar tu luz.
Jesús yo quiero ser compasivo con quien sufre,
Buscando la justicia, compartiendo nuestra fe,
Que encuentre una auténtica armonía
Entre lo que creo y quiero ser.
Mis ojos sean fuente de alegría,
Que abrace tu manera de ser.
Quisiera conocerte, Jesús, tal como eres.
Tu imagen sobre mí es lo que transformará
Mi corazón en uno como el tuyo
Que sale de sí mismo para dar,
Capaz de amar al Padre y los hermanos,
Que va sirviendo al reino en libertad.
Pasos de Jesús
Perder la vida, tomar la cruz
seguir los pasos de Jesús,
amar con su forma de amar,
perder la vida para ser luz.
Darse por el que nadie amó,
darse por el abandonado
que espera ver amanecer.
Prestar oído a su clamor,
amar como un enamorado
a aquél que nadie quiere ver.
Gritar que Dios no está dormido
y está dándonos su fuerza,
que va sembrando libertad.
Gritar que el odio no ha vencido
y la esperanza no está muerta,
y Dios invita a caminar.
Andar caminos aún no andados,
saltar abismos y fronteras,
ir donde nadie quiere ir.
Darle la mano al que está solo
y que ya todo lo ha perdido,
darle la fuerza de vivir.
Procesión de Salida: Cántico a María
Mi alma glorifica al Señor, mi Dios,
gozase mi espíritu en mi Salvador,
Él es mi alegría, es mi plenitud,
Él es todo para mí.
Ha mirado la bajeza de su sierva,
muy dichosa me dirán todos los pueblos,
porque en mi ha hecho grandes maravillas,
el que todo puede, cuyo nombre es Santo.
Su clemencia se derrama por los siglos
sobre aquellos que le temen y le aman;
desplegó el gran poder de su derecha
dispersó a los que piensan que son algo.
Derribó a los potentados de sus tronos
y ensalzó a los humildes y a los pobres
los hambrientos se saciaron de sus bienes
y alejó de si vacíos a los ricos.
Acogió a Israel su humilde siervo,
acordándose de su misericordia
como había prometido a nuestros padres
Abraham y descendencia para siempre.
María míranos
María míranos, María míranos
Si tú nos miras Él también nos mirará.
Madre mía míranos, de la mano llévanos
Muy cerca de él, nos queremos quedar.
María cúbrenos con tu manto
tenemos miedo, enséñanos a orar,
que por tus ojos misericordiosos
tendremos fuerza, tendremos paz.
Madre consuélanos en tus brazos
No queremos ofenderle más
Que por tus ojos misericordiosos
Vamos al cielo a verlos ya.